
Ya asoma el desastre
“No nos queda tiempo”, decía en mi último artículo de opinión, pero no pensaba que fuera tan poco. El ejemplo del Mar Menor, con peces boqueando en busca de un oxígeno que ya no tienen por culpa de la mano del hombre, es el espejo que nos muestra que mundo más horripilante nos espera si no hacemos algo ya mismo.
Comentarios recientes